Empecemos por los tópicos. De acuerdo a lo que tenemos culturalmente y a lo que nos cuentan de la historia es razonable pensar que la subordinación de la mujer en el orden establecido es de siempre. Y se considera, comúnmente, que los humanos cavernícolas e inmediatos sucesores, eran unos auténticos salvajes y brutos contra todo (Hay numeroso humor al respecto). Incluso en el estudio etnográfico se habla de una auténtica hostilidad entre hombres y mujeres en algunas comunidades melanésicas de Nueva Guinea. De ello hablaré en otra ocasión.
Pero si atendemos a los hallazgos arqueológicos relativamente recientes, especialmente a cargo de James Mellart, Marija Gimbutas o Rhichard Meadow, vemos que hubo un a época en que las gentes vivían conforme a una concepción mucho más igualitaria en cuanto a género y una devoción y respeto hacia el significado de la mujer. Todo ello fue destruido por la aparición de "Imperios" (Sumerio, Acadio), invasiones árias en Asia y Europa. Los últimos fueron los romanos imponiendo con el yugo de las espadas el nuevo orden mundial conocido entonces; y luego, con la aparición del cristianismo como religión del estado romano, se dio el toque final, pero todo ésto ya está en la historia escrita.
Son miles de años, decenas de siglos de sometimiento a un orden patriarcal absoluto. Es hora que las actuales generaciones de hombres, humildemente, cerremos dignamente este infierno. Este vídeo, hábilmente realizado, es una declaración y compromiso de generar una nueva masculinidad, reconociendo las atrocidades cometidas en nombre de la cultura y creencias, solicitando perdón y también el apoyo y corazón del mundo femenino para construir un mundo "Humano" conjuntamente. Me lo envió Verónica (Ananda Nilayán) desde Huelva y me considero comprometido a compartirlo con tod@s.
Ernesto Cabeza Salamó.
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